La fuerza del diseño dentro de los nuevos conceptos educativos
Texto: Marina Peniche
La llegada de la era de la información y la comunicaciónha transformado nuestra vida cotidiana y por ende, empieza a estar presente en aulas escolares como una herramienta más en el proceso educativo. En el lenguaje pedagógico en los últimos años se han introducido los conceptos de interacción, autogestión, flexibilidad, igualdad, entre otros, dejando de lado el ambiente autoritario, y cada vez menos funcional, del siglo XX.
Para reforzar este modelo de enseñanza, diseñadores y arquitectos trabajan por la elaboración de proyectos más didácticos y el desarrollo de una propuesta educativa en función de las necesidades actuales. A continuación hablaremos de tres proyectos que subrayan estas nuevas demandas.
Empecemos por descubrir un proyecto nacional que se gestó debido a la falta de recursos para mejorar las condiciones educativas en México, uno de los problemas más graves del país. Creativos mexicanos y empresas trabajaron en conjunto con el propósito de beneficiar a niños de escasos recursos.
Masisa, por medio del programa “Articula”, cuya intención es vincular los principales integrantes de la industria del mueble, convocó a estudiantes y profesionales a donar su trabajo para contribuir a la remodelación del Jardín de Niños “José María Luis Mora”, mismo que se encontraba en malas condiciones.
Para lograr este objetivo, el diseño de tres aulas corrió a cargo de grupos conformados por estudiantes y profesores de diseño. Por un lado, la Universidad Autónoma de México (UNAM) realizó una colorida propuesta con mobiliario vivo y dinámico. La Universidad Iberoamericana Campus Ciudad de México vistió el salón con mesas modulares capaces de encadenarse en una “sola mesa”, mientras que la universidad Centro de Diseño, Cine y Televisión dotó el espacio con diseños que remiten a elementos naturales y pueriles. A su vez, reconocidos creativos como Ariel Rojo, Cecilia León de la Barra y Row Studio diseñaron el salón de usos múltiples, el cual se transforma en un pequeño auditorio que conecta con el espacio exterior.
Sin duda, ésta es una colaboración que debe continuar a través de los años. Un ejemplo de cómo la participación entre diferentes sectores puede crear proyectos a favor de la educación, y de cómo el diseño genera un impacto positivo en la sociedad.
Otro proyecto que tiene como prioridad desarrollar nuevos métodos de enseñanza y la interacción como base para la educación es la escuela Vittra, ubicada en Estocolmo. Teniendo en cuenta esta premisa, el despacho danés Rosan Bosch diseñó los espacios de la escuela con mobiliario e interiores que facilitan la formación y el aprendizaje.
Las nuevas áreas permiten a los niños relacionarse amplia e independientemente; asimismo, motiva la curiosidad con elementos sensoriales y visuales. Se desplazan las aulas convencionales por espacios con cierta familiaridad y ambientes informales que fomentan la confianza del estudiante.
Funcionando como una plataforma instrumental, donde el espacio es el mediador entre el niño y su formación intelectual, se diseñaron zonas de aprendizaje individuales y colectivas, espacios de relajación y recreación, así como muebles a la medida para cada situación. También cuentan con laboratorios flexibles que proporcionan oportunidades para enfocarse en proyectos especiales.
Vittra tiene un gran interés en introducir medios digitales y didácticos que se apeguen a su doctrina, y Rosan Bosch los incorpora en el proyecto adecuando los espacios para que la tecnología se relacione con el ambiente y con los estudiantes. El diseño de la escuela actúa como una herramienta educativa para el desarrollo a través de las actividades diarias.
Finalmente, nos encontramos con un programa universitario que funcionó como promotor del aprendizaje, Die Baupiloten. Éste está implementado en la Universidad Técnica de Berlín como apoyo a la formación de los alumnos. Consiste en proyectos de construcción que los universitarios llevan a cabo con la orientación y supervisión del estudio de arquitectura Susanne Hofmann. Bajo este programa se realiza el diseño de interiores de la escuela primaria Mann Elementary School en Berlín, incluyendo un ambiente de formación primaria que se adapta a los recientes modelos de enseñanza.
Siendo consecuentes con esta nueva filosofía, se decidió crear una serie de talleres para que los niños pudieran participar y diseñar su escuela. Así se proyectaron las necesidades y fantasías de los alumnos a lo largo de los pasillos y aulas.
‘Dragón’ fue el concepto que abrazaron todos, y a partir de éste se crearon muchos otros adyacentes. La creación de una serie de espacios libres y adaptables con mobiliario multifuncional fue propio de este diseño vanguardista.
Se crearon asientos que permiten a los niños explorar y conocer sus cuerpos en forma de capullos elásticos y con una serie de mesas – sillas de superficies horizontales e inclinadas con elementos plegables. Éstos permiten que los alumnos encuentren autodidactamente la posición más cómoda en la que puedan aprender y jugar. También se implementaron filtros de luz que modifican la iluminación conforme cambia el clima, reflectores distribuidos a lo largo de la escuela que permiten la comunicación entre alumnos, paredes magnéticas con mosaicos de colores, espacios con caleidoscopios que cambian conforme los alumnos modifican los muros y un salón lleno de “pétalos” que protegen a los niños y desarrolla su creatividad al ser decorados por ellos mismos.
Hablar de diseño educativo es una innovación en donde el entorno se ha convertido, para las nuevas generaciones, en una interfaz que se constituye como elemento auxiliar en el proceso del aprendizaje. Estos proyectos son una muestra del proceso de transformación y progreso de los espacios escolares, en donde se supone un modelo distinto de concepción de espacios para que los alumnos sean los protagonistas y los ambientes permiten el acceso para apropiar y procesar información.
Créditos fotográficos
Jardín Lab cortesía de Masisa
Vittra Telefon Plan por Kim Wendt
Rosan Boch, Mann Elementary School por Jan Bitter
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